Desarrollo total del recurso humano
MANN+HUMMEL MÉXICO, una compañía de origen alemán, se estableció en 1993, en Tlalnepantla, y en 2004 se mudó a Querétaro. Entre sus clientes destacan Ford, Volkswagen y Chrysler. No obstante, su plan es continuar creciendo.
Esta Tier 1 cuenta con sistemas de inyección y soplado de plásticos –PP y PA, sobre todo– para la fabricación de sistemas de filtración para la industria automotriz, tales como las carcarasas y las cubiertas de dichos filtros, así como los sistemas múltiples de admisión de aire, botellas de anticongelante y ductos para aire.
Debido a que sus productos son muy especializados, MANN+HUMMEL MÉXICO ha desarrollado un plan de desarrollo a largo plazo para sus trabajadores. A sus operadores les ha brindado apoyo económico para que terminen sus estudios de preparatoria, lo cual propicia lealtad hacia la compañía.
De acuerdo con Manuel Lira, coordinador de ventas de MANN+HUMMEL MÉXICO, “buscamos el total desarrollo de nuestros colaboradores. Algunos entran como operadores y llegan hasta las oficinas en puestos de ingeniería de procesos o de producción. Gracias al tipo de capacitación que tenemos y a la lealtad que desarrollamos, hemos disminuido en gran medida la rotación de personal”.
En cuanto al tema de logística, Lira confía en que ya hay más componentes que se pueden conseguir en lo local. No obstante, aclara que el problema aún reside en la disponibilidad de la materia prima, ya que, afirma: “Nuestros ensambles requieren de resinas que aún no están disponibles en México. Por tal razón hemos hablado con nuestros proveedores locales para pedirles que nos ayuden a desarrollar dichos materiales brindándoles nuestro apoyo con la tecnología y los ingenieros necesarios, con el fin de que nos puedan ofrecer algo más competitivo”, y agrega, “también nos encontramos en pláticas con algunos organismos gubernamentales para que brinden el apoyo para la producción de esos materiales de manera local, ya que lo ideal es que el contenido de nuestros productos sea mexicano”.
De acuerdo con Lira, para hacer frente al rápido crecimiento de la industria automotriz en México y permanecer en su cadena de suministro “siempre hay que estar investigando e innovando, porque la competencia es fuerte y si te detienes, te quedas”, concluye.
Láminas para termoformado de autopartes
Uno de los líderes tecnológicos en procesos de coextrusión para la fabricación de láminas y películas plásticas de alto grado para una gran diversidad de aplicaciones es la firma austriaca Senoplast, S.A. de C.V., que cuenta desde el año 2000 con una planta de producción en el estado de Querétaro.
Con láminas y películas plásticas hechas a base plásticos de ingeniería como ABS, ABS/PC, PC, Acrilonitrilo Estireno Acrilato (ASA), PMMA y PS, esta compañía atiende a diferentes industrias, entre las que se sobresale la automotriz, donde cuenta con liderazgo a nivel nacional, así como con clientes internacionales muy reconocidos, como Volkswagen, Ford, GM, Toyota, New Holland, John Deere y Caterpillar, para quienes produce piezas exteriores que requieren alta resistencia UV y al impacto, así como piezas interiores que demandan acabados mate, semi-mate y diseños sofisticados.
De acuerdo con Alejandro Kukutschka, gerente de ventas Latinoamérica de Senoplast, en este mercado no hay muchos jugadores, incluso a nivel global “los que pueden alcanzar el nivel de expertise son muy pocos, y ese es uno de los puntos fuertes de Senoplast”, indica.
Para esta empresa, el sector automotriz es el más dinámico que atiende, y donde su personal asume la tarea de renovarse de manera constante a través de nuevos desarrollos y proyectos, los cuales tienen el respaldo del Área de Investigación y Desarrollo, desde Austria. Mientras que en México, se han dedicado desde hace algunos años a crear nuevos diseños de productos y han desarrollado patentes a nivel mund
ial con los cuales se han mantenido a la vanguardia.
Senoplast sólo se dedica a la proveeduría de lámina y no al termoformado como tal. Sin embargo, su personal cuenta con un conocimiento muy amplio sobre este proceso, pues 98% de su producto se dirige a las aplicaciones termoformadas. De tal manera que pueden apoyar a sus clientes en cuanto a la manufactura de las partes.
El desarrollo de los termoformadores de lámina plástica para la industria automotriz es un área de oportunidad: “Cada vez hay más compañías que se enfocan en este proceso. En Senoplast apoyamos a las nuevas empresas que quieren incursionar en este mercado en todos los procesos que conlleve su proyecto”, concluye Kukutschka.
Un mercado con espacio para todos
El volumen de las piezas que requiere la industria automotriz abre mercados para un sinfín de proveedores. Sin embargo, como detalla Juan Manuel Mújica Durán, responsable del área de Desarrollo Técnico de Ingeniería de Espumas S.A. de C.V.: “Va tener más oportunidad de proveer a este sector quien más se especialice y le brinde un mejor servicio al cliente final”.
Ingeniería en Espumas es una empresa 100% mexicana que se dedica a la fabricación y manufactura de espuma de PUR estándar y especial, y cuenta con una planta en el Distrito Federal y otra en Querétaro.
Además de espumas de PUR que transforman en productos para la industria automotriz, la firma también atiende a este sector con piezas de otros materiales, tales como Neopreno, Etil Vinil Acetato (EVA), EPDM y PVC, que funcionan como aislantes acústicos y térmicos.
En palabras de Mújica, el reto a vencer para las empresas mexicanas ante las grandes armadoras es que solicitan muchos requisitos para poder trabajar con ellas, por ello, todos los materiales de Ingeniería en Espumas están respaldados por su sistema de calidad ISO 9001 2008, lo cual los compromete a la mejora continua y a satisfacer las necesidades de sus clientes.
“Somos una empresa fiable. Lo que debemos hacer es trabajar en conjunto en el desarrollo de las nuevas aplicaciones”, asegura, y añade, “encontramos un nicho de mercado donde nuestro valor agregado se encuentra en transformar de manera local el PUR y entregarlo directamente a las plantas”.
Para concluir, Mújica nos dice que trabajar para el sector automotriz no es difícil, es, más bien, “un reto, porque cada día te empuja a hacer cosas nuevas en donde está la competencia y los clientes, lo que nos ayuda a integrarnos y a salir adelante”.