SABIC
La multinacional lanzó un nuevo compuesto LNP ™ THERMOCOMP ™ DC0041PE-7M1D145W de base biológica, que ofrece a los clientes una nueva opción sostenible para aplicaciones exigentes en los sectores eléctrico / electrónico, sanitario y otras industrias clave. Este nuevo compuesto retardante de flama reforzado con fibra de carbono tiene una huella de carbono reducida en comparación con su producto actual, el compuesto LNP THERMOCOMP DC0041PE7M1D145, al tiempo que ofrece las mismas propiedades.
De acuerdo con Joshua Chiaw, director de Administración Comercial, LNP Compounds & NORYL Resins en SABIC, el éxito de este compuesto de base biológica inspira a la compañía a acelerar sus esfuerzos de innovación para desarrollar formas totalmente nuevas de ayudar a los clientes y proteger el planeta.
Modelos de negocio circulares
El sistema actual de usar y desechar es un pensamiento que nos urge dejar atrás y, en su lugar, potenciar un modelo de economía circular, para reducir la producción de residuos e integrarlos nuevamente en la cadena de valor, sin castigar los precios y protegiendo, a su vez, los recursos naturales.
Las Industrias del Plástico y Caucho se enfocan progresivamente hacia estos principios mientras se esfuerzan por cumplir con las regulaciones ambientales cada vez más estrictas, reducir el uso general de materiales, encontrar formas de reciclar y reutilizar productos y materiales de manera efectiva, y desarrollar materiales más amigables con el medio ambiente, como lo son los de base biológica en lugar de petroquímica.
Existen numerosas formas de luchar por la circularidad y está claro que ningún enfoque por sí solo puede lograr los ambiciosos objetivos establecidos por la Fundación Ellen MacArthur y otros, centrados en la eliminación de residuos plásticos.
A pesar de los “ambientalistas” y de las leyes que prohíben los productos plásticos “de un solo uso”, sabemos que los envases y embalajes de plástico no son la única fuente de contaminación, puesto que los desafíos involucran diversos materiales, que, en comparación con el plástico, comprometen mucha más energía para su fabricación y/o mayor cantidad de agua…, no hay que ser un erudito para darse cuenta que cualquier producto que se envase en contenedores más pesados que el plástico, necesitará de mayor combustible en su transporte, o que el problema de la contaminación por plásticos (u otros materiales, como vidrio, metal, papel, cartón, entre otros) no es una responsabilidad del material per se, sino una responsabilidad compartida entre consumidor, industria y gobierno.
Hoy, vivimos en un mundo donde el plástico que desechemos puede volver a usarse, ya sea en la forma original o convertido en otro producto. Así lo muestran nuestros entrevistados y colaboradores:
EnerSalpra Consulting, el futuro de los plásticos biodegradables es hoy
El mundo del plástico atraviesa una crisis que está afectando los precios y producción de materias primas esenciales para la elaboración de productos plásticos. Sumado a esto, a principios del 2020 y 2021, en la Ciudad de México entró en vigor la Ley que prohíbe la comercialización, distribución y entrega de bolsas de camiseta, cubiertos, popotes, envases para transportar alimentos, entre otros productos plásticos “de un solo uso”.
La Anipac (Asociación Nacional de Industrias del Plástico) en conjunto con Inboplast (Asociación de bolseros responsables que hacen bolsas sostenibles), hicieron llegar una carta al Congreso de la Ciudad de México, con el propósito de solicitar la prórroga de esta prohibición. No obstante, se suspenderán los exhortos sobre el uso de bolsas de plástico de camiseta y se comenzará a aplicar las multas a los que entregan o comercialicen bolsas y productos de este material que no sean biodegradable o sean de un solo uso. Durante el mes de abril, las inspecciones dejaran de ser de carácter informativo y comenzaran a ser verificaciones formales, aplicando multas a aquellos que continúen con la comercialización y entrega de estos productos.
¿En realidad debemos buscar prorrogas a esa ley o es momento de dar el siguiente paso e invertir en bioplásticos?
Un sinfín de factores entran en juego al analizar los precios y mejores opciones de las materias primas convencionales. Actualmente, los precios de las materias primas de los más de 20 mercados del plástico han subido debido a la alta demanda y baja producción. En Europa, los productores de polímeros se enfrentan a causas de fuerza mayor, fallos de sistema, ralentizaciones y mantenimiento. De igual manera, los productores de productos plásticos afrontan importaciones significativamente menores. Los precios de la resina en el Lejano Oriente han superado a los de Europa durante meses, de modo que gran parte del flujo global de plásticos en bruto se ha redirigido de Europa a Asia.
Los grandes aumentos en los precios afectan de manera significativa a los transformadores de plástico, los cuales cuentan con contratos a largo plazo con varios de sus clientes, con cláusulas de aumento de costos, por lo que solo podrán amortizar los problemas hasta cierto punto, sin considerar que las trabas en el suministro de materias primas están poniendo en riesgo la producción de productos finales.
En resumen, la combinación de la reducción de la oferta con la demanda creciente hace que los precios aumenten a un ritmo sin precedentes. Según de qué materiales se trate, los precios han encarecido entre un 20% y un 50% con respecto a principios de 2021.
Con la suspensión de los exhortos para uso de plásticos de un solo uso y con la entrada en vigor de nuevas acciones que buscan cumplir la ley de residuos sólidos de la CDMX, incluyendo sus grandes multas, este es el momento en el cual las empresas y grandes trasformadores del plástico deben de empezar a considerar el uso de materias primas y/o aditivos biodegradables, puesto que el porcentaje de uso de éstos reduce la cantidad de materia prima convencional que se debe de utilizar al transformar productos plásticos.
Analizando los distintos mercados del plástico y entendiendo las dificultades por las que está pasando la industria, EnerSalpra amplió su portafolio de aditivos para la producción de materias primas, encabezado por su aditivo principal, BSP-P200tm.
Entre sus nuevos aditivos se pueden encontrar: BSP P200T, para la generación de productos biodegradables y compostables; BSP 013C y BIOPRO, para la generación de productos biobasados y biodegradables; y los aditivos BSP FA300 (con Fibra de Agave), BSP FM300 (con Fécula de Maíz), BSP FU300 (con Fibra de Uva), BSP FA300 (con Fibra de Palma de Dátil), para la generación de productos biobasados.
(Para más información escribir a info@enersalpra.com y/o jrodriguez@enersalpra.com)
Braskem Idesa, la sustentabilidad es un componente clave a corto, mediano y largo plazo
El segmento de PCR (reciclado postconsumo) de Braskem Idesa ofrece al mercado soluciones con contenido parcial o total de Polietileno reciclado de alta calidad para aplicaciones de alto desempeño. Esta división arrancó como un proyecto hace tres años, y “al día de hoy ya es una unidad de negocio que va creciendo muy fuerte”, comenta Javier Salinas, coordinador comercial en el segmento de PCR de la compañía.
“Arrancamos con Polietileno de Alta Densidad para aplicaciones de botella soplada; posteriormente, lanzamos al mercado Polietileno de Baja Densidad para aplicaciones de película flexible y película termoencogible, y recientemente introdujimos nuestra primera resina de Polipropileno PCR, para aplicaciones de soplado”.
De acuerdo con el ejecutivo, Braskem Idesa explora toda la gama de aplicaciones de PP en la que podría participar y continúa expandiendo su portafolio de Alta Densidad para incrementar los porcentajes, “arrancamos con 30%, subimos a 50%, estamos en desarrollo para un 70% y un 100%”.
Vender un reciclado sobre uno virgen, explicó, “ha sido un proceso de mucho aprendizaje, puesto que el mercado, en los últimos años, ha atravesado cambios importantes”, como la pandemia de COVID-19.
No obstante, a pesar de los retos, este año ha sido positivo, pues el mercado, a decir del experto, se muestra mucho más abierto y con una buena aceptación para el reciclado postconsumo. “Un material reciclado posee una serie de costos adicionales que no tiene la parte de resina virgen y también obedece a otras tendencias de mercado, hay una curva de oferta demanda del material reciclado postconsumo, no solo en México, sino a nivel global, y creo que los mercados cada vez comienzan a entender y a familiarizarse un poco más con este tipo de tendencias”.
Explicó que la alianza con el socio correcto permite la disponibilidad del material en el país, “…eso para nosotros desde el inicio fue muy importante, hicimos un trabajo muy a detalle para encontrar una empresa, un socio acopiador y reciclador que compartiera esta visión estratégica a largo plazo con Braskem Idesa y fue así como encontramos a nuestro socio, ALCAMARE”.
Braskem Idesa, refiere nuestro entrevistado, tiene una capacidad instalada con planes de expansión que van en línea con el crecimiento de la demanda. “La siguiente etapa para nosotros es la del proyecto FDA, con la que buscamos producir la primera resina con contenido parcial o total de reciclado postconsumo en México aprobada para aplicaciones de uso alimenticio, acompañado también de un proyecto de expansión en los próximos años”.
Braskem Idesa prevé obtener el siguiente año la certificación FDA y poner en disposición del mercado esta solución, “…estaríamos saliendo ya con una demanda incrementada a lo que tenemos hoy, hablamos de, aproximadamente, 20 mil toneladas anuales”, y subrayó que el proyecto de crecimiento seguirá, todavía, en los próximos años.
Antonio Quadro, Gerente de PCR, apuntó que la propuesta de Braskem Idesa es vender un producto PCR que tenga un desempeño muy parecido en procesabilidad, propiedades mecánicas…, y que sirva para la misma aplicación de virgen. “Nuestra propuesta es proveer a los dueños de marca comprometidos con el proceso de descontaminar el plástico”.
Mencionó que la tendencia de México no es diferente a la tendencia mundial, puesto que muchos de los dueños de marca que trabajan en el país lo hacen en todos los lugares del mundo, “creo que la mayor diferencia de México con relación a otros países es su tendencia a aceptar los costos de un proceso de reciclaje de calidad, en otros países donde esto está más maduro, las empresas están más acostumbradas a incrementar el contenido de PCR y llegar a 30 o 50%”, algo que apenas comienza a suceder en México”.
