Estados Unidos vive actualmente un intenso debate sobre las implicaciones de aranceles sobre la producción de plástico. Mientras se revisa en el Congreso la llamada Ley Reduce (Recompensar los esfuerzos para disminuir los contaminantes no reciclados en los ecosistemas), Tony Radoszewski, presidente y director ejecutivo de la Asociación de la Industria del Plástico (PLASTICS), destacó que un impuesto al plástico dañaría la economía y el medio ambiente.
La Ley REDUCE, presentada a principios de este año por el senador Sheldon Whitehouse (D-RI), se encuentra ahora mismo bajo seria consideración para su inclusión en el paquete de reconciliación de «vía rápida». Esta iniciativa impondría un impuesto masivo de 20 centavos por libra sobre la resina plástica virgen.
Al respecto, el presidente de PLASTICS advirtió que un impuesto a la producción de plásticos no sólo afectaría la economía, sino que implicaría afectaciones al medio ambiente.
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“El impuesto al plástico es regresivo por naturaleza y sería un puñetazo para las familias de clase trabajadora de todo el país que intentan llegar a fin de mes. Los hogares estadounidenses han visto cómo sus facturas de comestibles se dispararon en los últimos meses debido a niveles récord de inflación no experimentados en décadas. La adición del impuesto al plástico sería un insulto para las familias que simplemente intentan sobrevivir porque una cantidad significativa de los productos básicos que compran en la tienda de comestibles se verían afectados por este impuesto punitivo”, detalló.
Radoszewski apuntó que un impuesto masivo que aumentaría el costo de los artículos domésticos cotidianos en más de un 25% y amenazaría a decenas de miles de empleos de fabricación en todo Estados Unidos.
“¿Cuáles son algunos de los elementos que finalmente se verían afectados por el impuesto al plástico? Todo, desde productos para el cuidado personal como botellas de champú y acondicionador, envases de desodorante, botellas de solución para lentes de contacto y muchos otros productos cosméticos. También hay condimentos que incluyen salsa de tomate y mostaza, aderezos para ensaladas, especias, bocadillos, carnes envasadas y productos agrícolas. Eso es solo por nombrar algunos”, advirtió el experto.
