¿Cómo le fue al sector de la Construcción?
Aunque este año la industria de la Construcción en México arrancó con signos de mejora, los niveles aún se mantienen alejados a los registrados antes de la pandemia. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en la comparación anual, el valor real de las empresas tuvo una caída de 18.9%.
La industria de la Construcción, donde el PVC y CPVC son piezas clave, fue tan afectada como la industria Automotriz. Por ejemplo, Mario E. González, gerente territorial de Ventas de Cresco, identificó en los meses más críticos de la contingencia sanitaria una disminución del 20 al 30% en las ventas, en comparación con las cifras que se presentaron en el mismo periodo del año pasado.
Lo anterior, debido a la menor cantidad de obras y proyectos en el mercado, así como al cierre o paro de actividades de algunos de sus clientes (industrias y edificadoras de vivienda), sin mencionar la devaluación del peso frente al dólar, que colmó de más incertidumbre a ésta y a todas las industrias en México.
¿Qué hizo Cresco en Monterrey? Lo que muchas otras en empresas del sector: implementar acciones de reducción de gastos e inventarios, así como la eliminación de mermas, buscando ser mucho más eficientes y cuidando al máximo los recursos disponibles. La duda es: ¿cuánto costará económicamente la recuperación?
El calzado se renueva
De acuerdo con la Secretaría de Economía, cuatro entidades del país concentran el 94% del valor de la producción de calzado, situando a Guanajuato como la región con mayor fabricación (70%), seguido por Jalisco (15%), el Estado de México (5%) y la Ciudad de México (3%), lo que ha llevado a integrar nuevas tecnologías para satisfacer la demanda creciente y ofrecer productos más responsables con el medio ambiente.
Actualmente, con base a cifras de la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato (CICEG), en México la industria del Calzado genera cerca de 176 mil empleos directos y produce alrededor de 165 mil millones de pares de zapatos. Además, asegura que nuestro país ocupa el noveno lugar como productor de calzado. Por lo tanto, es una importante actividad comercial, la cual genera una cadena de proveeduría altamente competitiva, ya que el 85.6% de la producción es para consumo local y el 14.94% se exporta principalmente a Estados Unidos.
Como se sabe, en la industria del Calzado se emplea una gran variedad de materiales para su fabricación, como es el caso de telas, plástico, caucho y piel, entre otros. A nivel nacional, a decir de Iván Castillo, responsable de la Unidad de Negocios de Adhesivos, Recubrimientos y Especialidades en Covestro México, la industria transita hacia el uso de adhesivos más amigables con el medio ambiente, los cuales son hechos a base agua, en lugar de los a base solvente, usualmente utilizados para unir las suelas del calzado.
En este sentido, la industria del Calzado busca cada vez más la integración de soluciones tecnológicas orientadas hacia la reducción de la huella de carbono e incrementar la compatibilidad con el reciclaje, sin comprometer la funcionalidad de los productos para lograr la sustentabilidad del sector.
El tope en la industria Automotriz y la luz al final del túnel
La industria Automotriz está experimentando una desaceleración global. Se observó una disminución del 16% en la producción de vehículos de 2020, lo que equivale a los niveles de ventas de 2010, según la Organización Internacional de Fabricantes de Vehículos de Motor (OICA, por sus siglas en inglés).
MarketsandMarkets asevera que Europa experimentó una caída de más del 21% -de media- en 2020, pero los datos que han hecho temblar a esta industria van más allá, pues la consultora internacional apunta que todos los principales países productores experimentaron fuertes caídas, que oscilaron entre el 11% y casi el 40%.
La plataforma de investigación registró que Europa representó una participación de casi el 22% de la producción mundial. Mientras que, en Norteamérica, la producción de 2020, de 15.7 millones de unidades, representó una participación del 20% de la producción mundial.
La región de Norteamérica, de acuerdo con MarketsandMarkets, experimentó una caída de la producción de más del 20%, y la manufactura estadounidense disminuyó un 19%. Mientras que, en América del Sur el porcentaje se redujo en más de un 30%, con Brasil en casi un 32%, disminución que, sin duda, afecta negativamente al mercado global de la producción mundial de vehículos.
Cabe destacar que la industria Automotriz genera el 18.9% del PIB manufacturero de México, con una balanza comercial positiva superior a los 77 mil millones de dólares, lo que, de acuerdo con José Zozaya, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), ubica al país en una posición privilegiada.
“Para el sector Automotriz, México es de gran importancia, pues ostenta una posición privilegiada frente a otros países, no solo por su competitividad -que es mayor a la de sus pares en la región-, sino por su ubicación geográfica, su red de tratados comerciales y, sobre todo, por su mano de obra calificada”.
Es importante mencionar que este positivismo en la industria se acentúa con las oportunidades del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), sobre todo por el incremento en el Valor de Contenido Regional (VCR), ya que, anteriormente, el Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN) solicitaba 62.5% en la fabricación de vehículos y, ahora, el T-MEC, eleva el contenido a 66%, incrementándose cada año de manera gradual, hasta llegar a 75%.
