El Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas), colaboró con Adapta Color, empresa que desarrolla recubrimientos en polvo, el trabajo conjunto de ambas empresas tuvo el propósito de crear una nueva generación de pinturas con efecto insecticida. Se trata de un producto que recubre superficies para exterior, desde mobiliario hasta fachadas, y su eficacia puede llegar a superar los dos años de duración.
Dicho recubrimiento es totalmente seguro para la salud humana, puesto que no libera olores y está exento de sustancias activas que puedan ser tóxicas para las personas. Además, se trata de un producto de alta duración, ya que la pintura no presenta pérdidas significantes de la sustancia activa frente a las operaciones de lavado habitual. Por sus propiedades, una de las posibles aplicaciones prácticas del producto sería en arquitectura y mobiliario de jardín.
